Superpaternidad
Estilos de crianza
Los criterios de aceptación y sensibilidad, así como el grado de exigencia y control parental sobre el comportamiento y actuación de los niños y niñas son actitudes que marcan y van definiendo su desarrollo evolutivo.
Autoritario: Es un patrón de relación restrictivo en el que el adulto impone muchas reglas a sus hijos y espera su observancia estricta. Ejerce la fuerza y coacción frente al razonamiento con ellos para lograr que se cumplan.
Autoritativo: Se refiere al estilo parental más flexible y permisivo. Presenta un carácter democrático, desde el cual, unos padres cariñosos proporcionan a sus hijos orientación al tiempo que control y les permite tener voz a la hora de decidir la mejor manera de enfrentarse a sus retos y obligaciones atendiendo a sus capacidades. Otorgan al niño cierto grado de autonomía.
Permisivo: Los padres adoptan una actitud tolerante, con pocas exigencias, al tiempo que rara vez tratan de reconducir su conducta.
No implicado: Patrón que refleja un estilo distante y , a la vez, excesivamente desinteresado y permisivo. Nos transmite la idea de que no les importan las conductas de sus hijos, por lo que se podría hablar de negligencia o dejación de funciones inherentes a la paternidad.
Tomar conciencia de estos estilos de crianza nos lleva a reflexionar y poder mejorar cada día.
¿Sabrías además diferenciar qué es la superpaternidad?
A estos niños se les suele consultar todo, se les suele consentir todo. Los padres están supeditados a los deseos de los niños.
Se nos ha hecho creer que para ser buenos padres tenemos que resolver, por sistema, los problemas de los niños y niñas. Y, no solo eso, sino que además debemos anticiparnos a estos problemas.
Otra de las características más comunes de la superpaternidad es la sobreprotección. Los hijos se han convertido en seres intocables a los que nada se les puede decir.
El niño nunca se equivoca, se comporta así porque ha tenido un mal día, porque le ha sucedido algo, porque la educadora no lo entiende, etc. No tiene responsabilidades sociales y, por tanto, todo es justificable. Una frase muy típica es: "es que el niño tiene baja tolerancia a la frustración", como si la intolerancia a la frustración fuera una enfermedad crónica.
También se pretende educar niños superdotados, perfectos e hiperestimulados. Tienen muchas tareas y les falta tiempo para el juego libre que tan importante es para un buen desarrollo.
También existe, con esto de las redes sociales, una sobreexposición de los más pequeños haciendo de todo. Son asociados a marcas, a madres y padres bloggers, también hay niños que ya hacen sus propios vídeos, tutoriales, etc.
Todo lo que se hace en esta crianza de superpaternidad es con buena intención. Los padres quieren proteger a sus hijos de tal manera que quieren ocultarles los miedos. Una de las grandes obsesiones de hoy en día es "¡Qué mi hijo no se traume!".
Lo que se logra, en definitiva, es cargarnos los procesos de adquisición de autonomía, porque el mensaje que les trasmitimos es que ellos no pueden y que ya estamos nosotros ahí para darles todo aquello que necesiten.
Pero, ¿Cómo podemos mejorar esta situación?
- Dejándoles más autonomía. Confía en su potencial. Educa en la valentía.
- Estableciendo responsabilidades según su edad.
- Deja que se equivoque. Si no se equivocan no aprenden.
- Poniendo límites claros y coherentes. Decirle que no a tu hijo no le va a crear un trauma.
- No consultarles todo. Ni dejar que decidan ciertas cosas como la hora de irse a dormir.
- Hay asuntos que no son negociables. Decirles que no a algo y dejar que expresen su enfado es importante. Acompañarlos sin intentar coartarles el llanto. Tienen derecho a enfadarse y a llorar. Nosotros estamos ahí acompañando ese proceso sin juzgarlo pero no cedemos a los chantajes.
- No olvides que tú eres el adulto.
- Establece un apego seguro y equilibrado.
La familia no puede ser una institución democrática porque caeríamos en el colegeo y seríamos amigos de nuestros hijos, que es un error notable. Los padres son el poder ejecutivo, el legislativo y el judicial.
-Juez Calatayud (Granada)-